El óxido nitroso, conocido popularmente como “el gas de la risa”, es un gas incoloro de olor dulce, que actúa como un agente sedante seguro y eficaz en combinación con oxígeno. La sedación consciente con óxido nitroso consiste en una técnica por inhalación, no dolorosa, que puede ser usada en niños y adultos. La aplicación de este gas se realiza posicionando una pequeña mascarilla en la nariz del paciente y se suministra en primera instancia oxígeno puro, para luego continuar con la administración de óxido nitroso. Aproximadamente a los 60 segundos, el paciente comenzará a sentir una sensación de relajo, tranquilidad y comodidad absoluta. A partir de este momento, el odontólogo comenzará el procedimiento dental en forma completamente normal, mientras el paciente se siente feliz y liviano, anulando los niveles de miedo y ansiedad. Al mismo tiempo, el paciente sabrá quién es, dónde está, será capaz de recibir y ejecutar instrucciones dadas por el operador y podrá identificar si algo le molesta.

Terminado el procedimiento odontológico, se corta el suministro de óxido nitroso y se administra oxígeno puro durante aproximadamente 3 minutos. El paciente quedará absolutamente capacitado para reintegrarse a su actividad cotidiana de inmediato, sin sentir ningún efecto secundario debido a que este gas no se metaboliza y es eliminado rápidamente mediante la respiración.